Habiéndose enterado Jezabel de lo sucedido en el monte Carmelo, y de cómo Elías había dado muerte a sus profetas, mandó a un criado a amenazar a Elías.
¿Cómo responde Elías?
Imaginamos que respondería desafiando y poniendo punto final a esta situación de autoritarismo inicuo y fuera de control, pero no fue así.
Vemos que Elías tuvo miedo: "3 Viendo, pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está en Judá, y dejó allí a su criado".
Nos preguntamos ¿cómo puede ser esto, siendo Elías profeta de Dios, y que por medio suyo fue demostrado quién era el verdadero y único Dios de Israel?
Nadie está exento de pasar por estas situaciones, incluso Elías. Pero vemos que Dios trata con él y no lo deja en este estado, sino que le da una nueva misión y lo reconforta.
Y ¿qué hizo en el cap.4?
"4 Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres".
Vemos en el Vers. 6, que Dios sustenta a Elías, le envía un ángel para que lo alimente y así recupere fuerzas. Elías necesitaba reponer fuerzas, estaba exhausto.
Muchas veces en la lucha como cristianos, nos sentimos exhaustos, y somos tentados a caer en este estado. Pero vemos que Dios trata con esta situación. Elías necesitaba reponer fuerzas. Nosotros también lo necesitamos muchas veces, con tiempo, en la presencia de Dios, quien nos dará un nuevo enfoque y una nueva visión.
En el vers. 8-9 Vemos que Elías se retira al monte Horeb, ahí fue donde Dios habló a Moisés cara a cara, también es una analogía del calvario. Y es ahí donde Dios se manifiesta a Elías, pero de una manera diferente, ya no como fuego, sino esta vez, como un “silvo apacible y delicado”. En hebreo, la traducción es “el sonido del apacible silencio”.
En situaciones parecidas, volver al inicio, donde por primera vez hemos conocido a Dios, su perdón, su salvación nos hace encontrar de nuevo el camino de regreso.
En el vers. 9 ¿qué sucede?
Dios emplea este segundo tratamiento para Elías. Lo escucha, lo interroga, y lo hace dos veces. En el vers. 9 y en el vers. 14.
En el vers. 10 ¿cómo le responde Elías?
"10 El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he quedado, y me buscan para quitarme la vida".
Vemos su autojustificación, la expresión de la situación injusta en que se encuentra y su sentimiento de soledad.
En el vers. 15, Dios le da instrucciones a Elías de que unja a dos reyes y a su nuevo sucesor.
No podemos saber si esto se debió a la actitud de Elías, o quizá, simplemente era un nuevo tiempo, con nuevos propósitos para él.
Pero sí podemos ver que en todo momento, Dios lo acompaña, cuida, renueva su visión y sus propósitos, a través de un nuevo encuentro con él.
Para reflexionar:
¿Te has sentido como Elías en algún momento, has sido consciente de la ayuda de Dios en esas situaciones?
¿A dónde acudes cuando no sabes hacia dónde dirigirte, cuál es tu punto de inicio?
¿Cómo nos anima saber que Dios reserva un remanente que permanece fiel aún en medio de la persecución?
Oración
Que como Elías, podamos ser renovados en nuestro caminar hacia los propósitos y la voluntad de Dios, sabiendo que Él cuida de nosotros.
Que seamos parte de ese remanente que se mantiene fiel en los propósitos de Dios.